Jeremías 18:1-6
·
Dios es quien llama, Él nos hace y nos forma.
·
La figura del alfarero es muy parecida a lo que
Dios hace con nosotros.
·
Debemos dejar que Dios nos forme en cualquier
momento.
·
El alfarero no escoge cualquier barro, sino que
busca el mejor barro para renovar los vasos.
·
La razón por la que evangelizamos es por que no
sabemos a quien Dios va a escoger o a quien quiera usar.
·
No sabemos a quien Dios le va a revelar algo
nuevo.
·
No sabemos a quien Dios escogió desde su
nacimiento para cumplir su propósito.
·
Debemos entender como fue que Dios nos eligió,
el Espíritu de Dios nos eligió para llegar a las manos del alfarero y ser
formados. Romanos 9:21-24
·
La renovación de nuestra vida a través de la
formación de alfarería a veces causa dolor en nuestra vida pero todo es con el
propósito de renovar los vasos.
·
Al final cuando terminemos de ser hermosos vasos
de barro lo que sucederá es que Dios nos llenara de El, para que al final la
gloria y lo que se disfrute sea el contenido y que la gloria no sea para el
vaso, si no lo que Dios derramo dentro de el.
·
2 Timoteo 2:20-21